martes, 3 de junio de 2014

Saluma Centeno

Descripción de la vista

La experiencia de tomar conciencia sobre el sentido de la vista, que en fenomenología se le llama la “epojé”, la realice en mi cuarto y con las ventanas cerradas. Era de día, y no tenía ninguna luz eléctrica prendida, solamente la luz que entraba por las ventanas a través de las cortinas aunque estuvieran cerradas.

Empecé por cerrar los ojos por unos minutos y puede tomar conciencia de que es algo incómodo tenerlos cerrados de manera intencional y que aunque sea algo difícil de describir me pude dar cuenta que veía algo. Llegue a la conclusión de que, aun con los ojos cerrados y las ventanas cubiertas por las cortinas alcanzaba a ver aunque sea las paredes del ojo. Seguidamente abrí los ojos y puede ver casi de manera inmediata lo que estaba de frente a mí, que era una pared de color blanco.

Puedo decir con mucha sinceridad que la experiencia de tener los ojos abiertos y tomar conciencia de ello, es más cómoda y agradable, porque puedo distinguir muy bien lo que está delante de mí, es decir, su forma, su figura y su color, por eso es que puedo decir que es lo que está delante de mí.

Por tanto, para hablar de las esencias de la vista, tengo que comenzar por la “luz”. Sin definir lo que es la luz, puedo decir que la luz es lo que permite o lo que hace posible que el ser humano pueda ver, porque aunque las ventanas del cuarto estaban cerradas pude percibir un reflejo de la luz del sol, esto me lleva a la conclusión de que la vista no es algo que está solo en el polo yo, sino que se da en relación con otro objeto, que en este caso es la luz.

Otra esencia que se puede sacar del sentido de la vista y que es fundamental para que esta se dé es el ojo y todas sus funciones, porque aun cuando tenía los ojos cerrados y aparentemente no había luz podía ver la piel que cubre el ojo.

Con respecto a la variación de la imaginación, me puede dar cuenta que la vista tiene un límite y que a la ves es intencional.  Porque cuando hice el movimiento de los ojos y solamente de los ojos, me di cuenta de que si quiero ver todo lo que hay a mí alrededor, no depende solo de mis ojos sino que tengo que involucrar otras partes de mi cuerpo y el movimiento del mismo. También es importante la distancia del ojo, al objeto que estoy mirando, porque cuando me acerco cada vez más a la pared, me puedo dar cuenta de que hay detalles que no los podía ver sino me acerco.

En conclusión, la vista es capaz de distinguir formas, figuras, colores, y lo da casi de manera inmediata por eso es quizás, el sentido que nos da la evidencia más directa, sin embargo también se encuentra dentro de un sistema que involucra a los demás sentidos. Es capaz de hacer sentir inseguridad, molestia, sobre todo cuando tengo los ojos cerrados, y también hacer sentir alivio y seguridad cuando puedo ver.
  


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