Carlos Vásquez
En esta
descripción fenomenológica voy a enfocarme en lo que es el sabor, donde tome la
decisión de realizarlo con una manzana ya que es la que más me pareció adecuada
para hacerlo.
Para empezar
identifiqué lo que es la manzana, donde empecé a tomarla con la mano, luego la llevé a la
boca, comencé a morderla y a masticar lo que es la fruta, donde pude
experimenta una textura suave de parte de la esencia de la fruta en su interior
y ciertas partes duras debido a la cascara,, donde vi la diferencia de lo que
es en sí, la esencia interior de la fruta y la parte externa la cual es la
cascara.
Con respecto al
sabor, lo que pude experimentar al principio fue algo como dulce en la boca donde también note cierto sabor un poquito acido,
ya que empecé a sentirlo con la lengua debido a la saliva, pero que también lo
sentía en el paladar, en la zona de las mejillas, y en los dientes una suavidad
porque lo que masticaba era sauve. Después al seguir saboreando y deleitando el
contenido de la fruta experimente durante un momento un sabor dulce bien
definido y fue porque ya iba quedando la esencia de la fruta, porque ya no tenía
cascara.
En la medida que
seguía saboreándola y tragaba la fruta y su sabor sentí en
la zona de la garganta un sabor dulce, que producía en la zona de mi
estómago una sensación de suavidad, que me llevaba a seguir deleitando el sabor
de la manzana; este sabor dulce se hizo
más intenso, y que la saliva se me puso dulce experimentando el sabor de la fruta
en su totalidad solo con la saliva, esto es debido a que entre más dulce y suave sentía el sabor,
mas saliva se producía en mi boca, que era como agua en la boca que se ponía dulce
debido al sabor de la fruta y que también se desplazaba por mi garganta hasta
llegar a mi estómago, que producía cierta suavidad en esta parte de mi cuerpo.
Todo lo que experimenté en el sabor de la manzana, es debido a su toque crujiente
y delicioso que tiene esta fruta, ya que desde el inicio causa una impresión su
sabor, además del jugo que se produce al entrar en contacto con la saliva, se
produce un cierto deseo de seguir experimentando el sabor exquisito de esta
fruta, que también al estar disfrutando el sabor a veces entra como hacer una
comparación entre el durazno y el melocotón, pero no es lo mismo , ya que si
pudiera darle un color al sabor de la manzana será rosado y rojo, aunque por
cierto sabor acidito que tiene, también le daría un color verde limón.
Después de haber experimentado el sabor dulce de la manzana lo
máximo, este sabor dulce fue disminuyendo, debido a que ya no existía el
contenido de la manzana, y poco a poco fue desapareciendo hasta que quedó un cierto sabor de la saliva como simple,
pero con un poquito de sabor dulce, que
después desapareció quedándome solo el sabor de la saliva.
Es interesante cuando nos detenemos a analizar cosas que en la cotidianidad pasamos desapercibido, y el sabor es una de ella, porque la mayoría de veces nos quedamos en sensaciones que responden a aspectos generales, donde analizar el sabor, es encontrar un sinnúmero de sensaciones y estimulaciones a como las has descrito en el ejercicio, donde al final uno decide tomar o rechazar lo que ha consumido. Y esta habilidad de rechazar o aceptar es el trabajo delicado que tiene el gusto, en todo su conjunto. Es interesante la conexión lengua-saliva que haces para percibir el sabor de la manzana, pues rara veces puedo percibir esa descripción, por lo que considero que cada quien tiene diferentes apreciaciones en cuanto a percibir cosas por medio de los sentidos, en este caso el gusto. En este sentido el efecto de sentir cuando un alimento llega al estómago, lo he experimentado pocas veces, y específicamente cuando no tengo nada en el estómago, o sea, he pasado varias horas sin probar alimento. Solamente considero debías haber realizado una diferencia entre textura y sabor, pues con la lengua de alguna forma está ligado al tacto, y has dejado un poco ambiguo la referencia que das porque solo hiciste énfasis en el sabor, aunque mencionas al durazno y el melocotón, como algo crujiente, pero no fundamentas o describís lo que es crujiente para vos. Y por último, considero que la descripción noética quedo un poco limitada en la descripción del ejercicio. Saludos.
ResponderBorrarMe intriga eso de sentir algo llegar al estómago. Me pierdo en la garganta un poquitín más abajo tal vez. Como quiera que sea, ¿hay sabor y saborear allí? Ojo con la redacción y la puntuación. También con las muletillas "lo que es" y "donde"...
ResponderBorrarAl leer esta descripción todavía me queda la duda si el sabor está en la boca, en el paladar, o en otras palabras el sabor solo está en el cuerpo o depende de un objeto (en este caso la manzana), para que se dé el sabor. Considero que a la descripción del sabor de la manzana, le faltó identificar o describir que tipo de manzana era, para darse una idea de que realmente tenía un sabor ácido. Porque ciertamente que las manzanas dependiendo de su clase y madurez, se experimenta otro tipo de sabor que no es dulce.
ResponderBorrarTambién creo que no en todas las experiencias del sabor, se logra sentir “algo en el estómago”, físicamente, por tanto esto no pertenece a la esencias del sabor.
Y por último, me parece muy acertado describir la función que hace la boca, pero no sé si entraría dentro de una “descripción del comer”, porque una cosa es llegar a la esencia del sabor y otra muy diferente es la esencia del comer. Pero creo que para que se dé el sabor, necesariamente tiene que estar dentro de la boca, y en ese sentido la boca juega un papel muy importante.