lunes, 5 de mayo de 2014

Descripción-análisis sobre el sabor dulce

Wilfredo Chicas Medina

En una tarde de esas de solaz esparcimiento decidí probar cierta cantidad de azúcar y experimentar que se siente el consumir algo así. Inicialmente evoco que la boca está un poco reseca.  Seguidamente inicie a oler la cantidad que iba a consumir. Al hacerlo, rápidamente asocie el olor que no es tan fuerte con la sensación a sabor dulce. El olfato rápidamente empieza a preparar la boca y en especial la lengua, se inicia a salivar cierta cantidad antes de ingerir. Hay un preparativo de humedad por parte del gusto en la boca para disponer a ésta a ingerir la sustancia. La lengua enseguida comienza a hacer movimientos, algo así como a saborear antes de hacerlo.

Llega el momento en el que decido ingerir el azúcar. La cantidad de saliva se incrementa.  Percibo que en este caso concreto la lengua es un medio pasa saborear.  Me parece que quien hace que se saboree con gran agrado es el sentido del gusto. Me percato que el sabor es una sensación causada por algo en el gusto. En esta ocasión es un sabor agradable, no árido. Causa cierta impresión poner atención a estos detalles. Ello es resultado de algo que se come. No se da en otros momentos en los que no se hace el ejercicio de comer. Otra cosa que me parece evidente después de ingerir el azúcar es que dentro de la boca se empieza a descomponer la sustancia, es algo que parece ser automático. Los dientes y muelas al hacer el  movimiento de la mandíbula trituran el producto.

Siento algo interesante al hacerlo. Debo de ser yo quien impulse las mandíbulas a moverse, aunque no requiere de gran esfuerzo. Pude decidir no hacerlo, sin embargo lo hice.  Aunque hay algo dentro de mí que me impulsa a hacerlo al tener la sustancia en la boca, pero soy yo quien determina como hacerlo y a qué velocidad. En este caso no requiere de muchos movimientos. El sabor en esta ocasión me parece percibirlo un poco más, cerca de los bordes de la lengua, y algo en el centro aunque no es muy específico. Me doy cuenta que el cielo de la boca y la parte interna de los cachetes no tienen una función específica a cómo ayudar a determinar el sabor. No se siente el sabor en estas partes. Es algo así como si hubiera ciertos sensores en ciertas partes de la lengua que ayudan a identificar la sensación. Me parece que para identificar el sabor, la parte más significativa que ayuda a hacerlo  es la lengua. Aunque el olfato y el gusto son parte de ello.  No se siente en otras partes del cuerpo que no estén asociadas los sentidos del gusto, y el olfato. No se siente en los pies o en las manos por ejemplo.


Se saborea cada vez que se mueve la mandíbula y más si es despacio. Se siente que se reconoce el sabor si así se hace. Se siente un tipo de goce hacerlo. Si se hiciera rápido no se notaría del todo la sensación que produce la sustancia ingerida. No se disfrutaría. De esta manera se desea saborear más el sabor. Se siente que se asocia el sabor a otras sustancias que llevan algo de parecido. Se saborea no con la lengua directamente, sino con el gusto. Se siente algo de saliva que prepara el momento en el que se va a ingerir. La nariz y el olfato también al acercar la sustancia activan que surja saliva un poco más de lo común. Con la lengua pasan algunas cosas, no permite que se valla la sustancia hacia el esófago si no está bien salivada. Cuando los dientes trituran es la lengua la que se encarga de cubrir la sustancia de saliva. De esa manera llega un momento en el que lo digerido está suficientemente húmedo para ser llevado hacia el estómago. Se va lentamente, pero se queda algo del sabor en la boca. Se van terminado los rastros de éste poco a poco. 

3 comentarios:

  1. Me parece bien el intento que has hecho, de relacionar dos sentidos como lo son el olfato y el gusto. Aunque puede ser un tanto confuso ya que comienzas dándole un alto realce al olfato y tu descripción es del sabor.
    Uno de tus grandes aciertos es haberte centrado en la sensación o el rose de la azúcar con lengua porque esto implica que estas atento al sentido del gusto que comienza con el tacto de la lengua.
    Considero que tienes que explicar términos como «árido» porque lo mencionas pero no explicas, es acá donde me quedo intentando interpretar que es un sabor árido. Podrías utilizar un buen ejemplo para dar a entender mejor este término.
    Quiero detenerme en tu sensación como la azúcar de deshacía en tu boca esto solo es producto de la saliva que produce el mismo sentido del gusto, claro que para adelantar le proceso puedes masticar el azúcar y no sé si con esto puedas encontrar el verdadero sabor. Indudablemente la función que tiene la lengua en el sentido del gusto es sumamente importante, pero para poder entender mejor tu experiencia con lo dulce tienes que describir que es lo dulce. Tu esfuerzo descripción me parece excelente pero no abordas el sabor como tal.

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  2. Tiene razón Rigoberto en las observaciones. Al final no saco esencias sobre el sabor. Es una cosa un poco dificil sacar las esencias ¿No lo cree?

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  3. Muy buen esfuerzo por describir fielmente el sabor dulce y su proceso de ser saboreado. Dado lo que decís acerca del papel prácticamente exclusivo de la lengua, entro en duda sobre la expresión común y corriente acerca del papel del paladar en todo esto...

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